Quizá hayamos vivido mil vidas antes que esta y nos hayamos encontrado en cada una de ellas. Y hasta es posible que en cada ocasión nos hayamos separado por los mismos motivos. Eso significa que este adiós es a un tiempo un adiós de diez mil años y un preludio de lo que vendrá. Es más bien vivir, para saber que tarde o temprano nos volveremos a ver, y que por más que HOY no seamos los mismos, aquel encuentro será aquello de lo cual en cada vida esperamos. Es un obstáculo que debemos atravezar,y cada vez te juro me resulta menos sencillo tener que despedirme aún sabiendo que algún tiempo, o en algún espacio nos permitiremos estar juntos. Cuando te miro, me sorprende tu belleza y tu gracia y sé que han crecido y han mejorado con cada vida que has vivido. También sé que te he estado buscando durante todas mis vidas anteriores, y que en todas ellas te encontré pero de maneras diferentes. No buscaba a alguien como vos, sino a vos, tu alma y la mía están destinadas a estar juntas. Y sin embargo, por razones que escapan a nuestro entendimiento, nos han obligado a despedirnos. Me gustaría decirte que todo se arreglará entre nosotros, y te prometo hacer lo que esté en mis manos para que así sea.Pero si no volvemos a vernos y esta es una verdadera despedida, sé que nos reencontraremos en otra; en donde por fin probaremos la suerte que hoy dejamos de lado. Volveremos a encontrarnos, y aunque las estrellas hayan cambiado y los amaneceres sean cada vez menos frecuentes, no nos amaremos sólo por esa vez, sino por todas las veces anteriores.Mientras tanto tendré que buscar otro camino, o alguien con quien caminar. No querido! esto no es un remplazo.. es un abrigo para esos días que me invade el recuerdo de tu olvido. Si nada es para siempre, ¿Por qué sigo dando vueltas? ¿Por qué vuelvo a pasar una y otra vez por el mismo lugar, por los mismos recuerdos? En algún momento del camino los pierdo, pero vuelven.
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